La anciana y el gato mágico del pellejo blanco
En una casita fuera de Paris vivía una anciana que estaba sentada en un sillón de tela azúl al lado de la chimenea, leyendo los primeros capítulos de una novela. Era noviembre, ya empezaba a anochecer, y fuera estaba lloviendo a cántaros & hacía mucho frío. La nieta de la anciana, que le estaba visitando durante el fin de semana, oyó un maullido delante de la ventana: era un gatito de pellejo blaco y suave. Cuando la niña abrió la ventana, el gatito enseguida se fue corriendo hacía el sillón donde estaba sentada la anciana. La gata saltó en su regazo, se tumbó, y ella sin decir nada, la acarició lentamente concentrandose profundamente en su novela. La nieta se había sentado entre la chimenea y el sillón, dibujando el gatito. En el momento en el que la nieta subió la mirada para dibujar las patas del gatito, no podía creer lo que estaba viendo en ese momento: el gatito desapareció entre las páginas del libro que estaba leyendo la anciana. Parecía que ella no estaba sorprendida de lo que había pasado.
Una família de gatos que vive en una ciudad como Londres, tiene que soportar el frío y la lluvia. La madre del gatito se preocupaba mucho porque él desapareció y volvió regularmente.
La nieta, por segunda vez, no podía creer lo que estaba pasando: el gatito volvió a aparecer entre las pàginas, saltó al suelo, se fue en dirección de la ventana, y desapareció en la lluvia y en la oscuridad. Durante todo esto, se comportaba como que nada hubiese pasado en absoluto.
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